Que los muslos ni se toquen, que el hueco entre las piernas sea lo más amplio posible. Una obsesión que se ha extendido por la red. Los endocrinos aseguran que muy poca gente va a poder tener ese hueco, que es una cuestión de constitución. Una moda enfermiza que ya tiene etiqueta: 'Thigh-Gap'. Miles de tutoriales animan a conseguirlo; otros lo ridiculizan. La obsesión puede perjudicar a la salud porque puede llevar a la anorexia.