Las lluvias caídas en los últimos días han provocado imágenes cada vez menos frecuentes en nuestro país: Embalses hasta arriba de agua.
Prueba de ello ha sido el de Villacampo en Zamora, que ha tenido que abrir sus compuertas por la acumulación de agua.
Las presas de la Cuenca del Duero superan el 90 por cierto de su capacidad.
Muchos curiosos han querido ir hasta allí para ver la escena, pero algunos se han acercado demasiado. Mucha precaución porque este espectáculo puede ser muy peligroso.
La situación del caudal preocupa especialmente en la provincia de Zamora, que continúa en alerta por la crecida del río.