El amor para siempre existe. Al menos eso es lo que demuestra la historia de Bob y Corinne Jonhson, una pareja que vivió durante 68 años su pasión hasta que ambos murieron con apenas 33 horas de diferencia en un hospital de Minnesota, EEUU.
Bob y Corinne nacieron y vivieron en una granja del condado de Nicollet, en Minnesota, donde se casaron en octubre de 1951 y tuvieron a sus siete hijos, que ahora rememoran el amor de sus padres, tras el reciente fallecimiento de ambos con poco más de un día de diferencia.
Bob de 88 años sufría de cáncer y Corinne, de 87, una grave insuficiencia cardíaca. Vivieron de forma autónoma en su granja hasta que la enfermedad que sufrían se agravó. Fueron ingresados en la misma habitación de un hospital, donde a pesar del sufrimiento de la enfermedad no se ahorraban caricias y momentos de afecto.
Corinne fue la primera en irse, no sin declararle por última vez su amor a Bob con un "te amo", según ha publicado la revista People. “Cuando nuestra madre falleció, corrieron la cortina entre las dos camas y él solo miró la cortina”, contó Beth Kinkeade, una de las hijas. Las lágrimas salieron de los ojos de Bob con la noticia.
Lora Dennis, la hija menor de la pareja, ha contado que todos los hermanos estaban preocupados por cómo uno de los padres iba a vivir sin el otro. “Su plan parece que era no preocuparnos por eso”, aseguró.
A pesar de que los hermanos Johnson lloran la pérdida de sus padres, también encuentran consuelo. “Creo que todos sabemos que están en un lugar mejor”, dijo Lora.