Vestir habitualmente pantalones ajustados y demás prendas de ropa que oprimen el cuerpo, favorece la aparición de problemas cardiacos, ya que este tipo de vestuario dificulta la circulación sanguínea, facilitando así la aparición de infartos pulmonares y trombos.
Así lo confirma la Fundación Española del Corazón, quienes recuerdan que para prevenir enfermedades cardiovasculares, se deben seguir unos hábitos de vida saludables.
La ropa ceñida también provoca retención de líquidos y de toxinas, favoreciendo la aparición de celulitis.
Se considera ropa ajustada, aquella que impide realizar movimientos de forma natural, y que después de haberla llevado durante varias horas, deja marcas en la piel.