Según informa Rosario3, entre las miles de palomas que participaban en una carrera de aves en La Pampa, Argentina, se filtró una de ellas la cual no se dirigía hacia la meta. El objetivo del ave era llegar hasta el Penal de Santa Rosa para dejar allí drogas que transportaba con ella.
Amarradas al cuerpo del animal con un pequeño trozo de tela blanca, la paloma llevaba consigo 44 pastillas, marihuana y un pen drive. “Llevaba amarrado un retazo de tela con forma de mochila, en cuyo interior había estupefacientes”, indicaron fuentes del Servicio Penitenciario Federal (SPF).
Según detallan desde el SPF, la maniobra había sido estudiada hasta dar con la paloma perfecta.
Según reporta el diario argentino, no es la primera vez que los narcotraficantes utilizan esta técnica. En agosto de 2013, se detectó una banda que realizaba sus operaciones con palomas mensajeras.