Los padres de Julen, José Roselló y Victoria García, "son los primeros que quieren que se llegue al fondo de los hechos" por lo que se han puesto en manos de un representante legal, que tiene despacho en Málaga capital, para que vele por sus intereses. El cuerpo de Julen fue rescatado en la madrugada del pasado 26 de enero del pozo en el que se encontraba a más de 70 metros de profundidad tras trece días de búsqueda.
Los abogados de David Serrano Alcaide, dueño de la finca donde murió el pequeño, afirmaron ayer en rueda de prensa que «la única responsabilidad penal, si la hubiese», sería del pocero que ejecutó la perforación y que su cliente tapó el agujero con dos bloques de hormigón y advirtió a los demás del peligro.
El Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga continúa recabando toda la información sobre el asunto, informes, declaraciones y atestados relacionados con el suceso y hasta el momento no ha tomado declaración a nadie, ni al empresario que efectuó el pozo, Antonio Sánchez, ni al dueño de la finca.
El pocero siempre ha mantenido su inocencia y ha afirmado que hizo bien su trabajo, en alusión a que tapó el orificio con una piedra, por lo que reiterará esta versión cuando declare en sede judicial.
El padre de Julen: “Cierro los ojos y veo lo mismo, el pozo"