El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha asegurado este jueves que ve "inconcebible" "ni como mera hipótesis" su reciente imputación por el 'caso Dina' porque "todo el mundo sabe lo que va a decir el Supremo.
"Es absolutamente imposible, no va a ocurrir", ha sentenciado en declaraciones a Rac 1. Además, ha sido tajante a la hora de rechazar su dimisión.
En este sentido, ha asegurado que sería "inconcebible" que en una democracia como la española, donde han ocurrido "cosas graves" pueda acabar como investigado en esta pieza, dado que es víctima y no hay ninguna prueba que sustente la solicitud del juez.
Iglesias también ha subrayado que su formación sufre desde hace años una "persecución" y que con su entrada en el Ejecutivo, la derecha está dispuesta a utilizar "todos los medios, legales e ilegales" para tratar de hacer caer al Gobierno.
El juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, elevó este miércoles una exposición razonada al Tribunal Supremo para solicitar que investigue al líder de Podemos, Pablo Iglesias, debido a su condición de aforado, por el delito de daños informáticos, revelación de secretos y denuncia falsa por su presunta implicación en la 'pieza Dina' que se investiga en el marco del conocido como 'caso Villarejo'.
Solo pocos minutos después de conocerse esta noticia, la reacción de la mayoría de los partidos políticos no se hizo esperar. Desde el PP, Pablo Casado, exige al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que "cese de inmediato" a su vicepresidente. Según recalca, el secretario general de Podemos debe cumplir ahora "la misma vara de medir" que pedía en la moción de censura contra Mariano Rajoy.
A su petición se unieron otros miembros del propio partido, como el portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, Javier Maroto, o el alcalde de Madrid, Martínez Almeida.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha apoyado este miércoles a su vicepresidente segundo. En una conversación informal con los periodistas minutos antes de tomar un avión rumbo a Argelia para una visita oficial, Sánchez ha dicho que no se encuentra preocupado y ha respaldado a su vicepresidente, con quien ha hablado, al tiempo que ha subrayado su absoluto respeto por las decisiones judiciales.
Otras fuentes de la Moncloa consultadas inciden en que no hay preocupación ante la situación judicial del vicepresidente, en la misma línea que se han manifestado personas cercanas a la ministra de Igualdad, Irene Montero, o la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, también de Unidas Podemos.
Díaz se ha mostrado "tranquila y muy confiada" en la inocencia de Iglesias, y un paso más allá ha ido el ministro de Consumo, Alberto Garzón, que ha considerado que "las fuerzas reaccionarias" van a por Iglesias, porque encabeza un proyecto de regeneración y modernización del país. "Mucha fuerza, no estás solo", ha animado Garzón al vicepresidente a través de las redes sociales.
La posición del partido de Iglesias ha sido la de asegurar que no "dan crédito" a que el juez haya dado este paso días después de que Iglesias recuperase su condición de perjudicado en la causa. Y han vuelto a cuestionar la actuación de un juez que Podemos considera que responde a los intereses de la derecha.
Su portavoz en el Congreso, Pablo Echenique, ha llegado a acusar a los jueces de ir "contra Podemos y contra Pablo Iglesias", porque contra ellos "vale todo", y ha añadido que la Justicia "persigue sin pruebas" a un partido "antifascista y defensor de los derechos humanos como Podemos".
Iglesias, sin embargo, ha guardado silencio y no ha deslizado mensaje alguno sobre su situación en la presentación del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, donde ha intervenido al igual que las otras tres vicepresidentas, Carmen Calvo, Nadia Calviño y Teresa Ribera.