La Guardia Civil ha desarticulado un entramado que introducía en Melilla a mujeres de procedencia extranjera en avanzado estado de gestación para que, después de alumbrar a sus hijos en el hospital comarcal de la ciudad, un hombre de nacionalidad española lo inscribiera en el registro civil como si fuera un hijo biológico de ambos.
Se investiga a 40 personas tras acreditar que se alteró la paternidad de 36 recién nacidos, pagando hasta 3.000 euros a españoles con escasos recursos y en algunos casos con perfiles delincuenciales. Hay casos de un mismo hombre que ha registrado a seis niños utilizando este entramado.
Con este engaño, las madres, que carecían de vinculación, arraigo y documentación española, obtenían la residencia legal y la nacionalidad española para sus bebés, según ha informado la Guardia Civil, que
investiga a las 40 personas por los presuntos delitos contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, falsedad documental y alteración de la paternidad.
Tras el alumbramiento, llegaban a un acuerdo con hombres de nacionalidad española, residentes en la ciudad, por lo general con escasos recursos económicos y algunos con perfiles delincuenciales, que se ofrecían para aparentar ser los padres de los recién nacidos, recibiendo a cambio pagos de cantidades que oscilaban entre los 1.000 y 3.000 euros.
En el marco de la Operación Vástago, el Instituto Armado ha dado por desarticulado en Melilla un entramado delictivo que alteraba la paternidad biológica de recién nacidos. Asimismo, se ha descubierto la alteración de la paternidad de 36 recién nacidos de mujeres extranjeras, inscritos en el registro civil de Melilla como hijos de españoles.
La operación se inició al obtenerse indicios de unas prácticas sospechosas, consistentes en conductas y actos que adoptaban en la ciudad de Melilla mujeres embarazadas de procedencia extranjera con otras personas de nacionalidad española, con los que no les unía vínculos de cercanía, afinidad o parentesco alguno.
Antes de procederse al cierre de la frontera terrestre a consecuencia de la pandemia de la covid19 el pasado mes de marzo, mujeres extranjeras embarazadas pasaban a Melilla a través del paso fronterizo de Beni-Enzar. Y una vez en territorio español, alumbraban a sus recién nacidos en el hospital comarcal de la ciudad y obtenían la correspondiente documentación facultativa de nacimiento.
Con el documento que el hospital les expedía a la madre tras el alumbramiento, el ciudadano de nacionalidad española, captado previo pago, se personaba ante el registro civil e inscribía al recién nacido como hijo biológico propio y de la madre extranjera.
Posteriormente y tras obtener el libro de familia, se solicitaba en la jefatura de Policía Nacional el DNI para el recién nacido y en la oficina de extranjería de la Delegación del Gobierno el NIE para la madre. De esta forma, ha explicado la Guardia Civil, regularizaban su estancia en España personas de procedencia extranjera en situación irregular, mediante un procedimiento fraudulento. A los ahora investigados se les ha tomado muestras de ADN para poder acreditar, mediante cotejo de las muestras biológicas, los datos falsos aportados ante los diferentes organismos oficiales.
Como ejemplos representativos de esta trama, la Guardia Civil ha destacado el de un hombre que ha llegado a inscribir en el registro a seis niños recién nacidos, como hijos biológicos suyos y de cinco madres biológicas distintas.
La investigación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla. Asimismo, las pruebas biológicas han sido realizadas por el Servicio Central de Criminalística.