Es conocido como el niño Spiderman de Coslada, aunque en vez de ser un superhéroe que captura a los malhechores, usaba su facilidad para escalar para perpetrar robos. La habilidad le venía de cuando su madre le encerraba en casa, según los que le conocen del barrio. Él se escapaba y desde entonces potenció sus habilidades, pero con un fin delictivo. Sorprende que un niño de 12 años de edad fuera ya de sobra conocido por la policía nacional y municipal.
No era la primera vez que cometía robos en viviendas pero esta vez el destino le jugó una mala pasada. Un resbalón, mientras intentaba robar en un edificio de viviendas en Coslada, le provocó un traumatismo craneoencefálico y varias fracturas. Fue trasladado por una UVI del Summa al Hospital Niño Jesús. Ahora se encuentra en estado muy grave. No se sabe aún si el menor logró cometer el robo y sufrió la caída mientras abandonaba el piso. Parece probable porque unos vecinos ya han denunciado el robo de joyas.