Rafael Álvarez Fernández, un pequeño de solo cuatro años de Oviedo, ha fallecido. Necesitaba un trasplante de médula que no ha llegado. A pesar de que los médicos buscaron dentro y fuera de España un donante para él, no encontraron a nadie compatible.
Rafael nació en diciembre de 2014. Su vida se complicó cuando empezaron a salirle moratones por todas partes. Los médicos confirmaron el peor de los diagnósticos: leucemia linfoblástica aguda, según informa el diario ABC. Desde entonces este pequeñín no había dejado de pelear contra el cáncer.
Tras largos periodos en el hospital y muchas sesiones de quimioterapia consiguió ganar la batalla al cáncer. Sin embargo, sus padres, Óscar Álvarez y Noelia Fernández, recibieron la terrible noticia en 2018. Rafa había recaído.
Los médicos del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) movieron cielo y tierra para ayudar a Rafa. Buscaron en el Registro de Donantes de Médula Ósea (Redmo) y rastrearon bancos de otros países, sin éxito. Las terapias más novedosas tampoco fueron suficientes. Rafa ha muerto con cuatro años.