Un niño muere atropellado por el vehículo que conducía su padre
El siniestro tuvo lugar durante un desfile de Navidad en Tennessee (EEUU)
El pequeño, de siete años, no pudo superar las graves lesiones sufridas en la cabeza
Rowan Ace Frensley, un niño de siete años, murió después de ser golpeado por una camioneta conducida por su padre durante el final de un desfile de Navidad. El pequeño se cayó del remolque y fue arrollado por los neumáticos del vehículo. El trágico suceso tuvo lugar el pasado sábado en Tennessee (Estados Unidos).
Los agentes de policía llamaron inmediatamente a los médicos, que trasladaron inmediatamente al niño hasta un hospital local. Desgraciadamente, Rowan no pudo superar las graves lesiones que sufrió en la cabeza.
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El informe indica que el padre conducía a baja velocidad y estaba situando el vehículo para dejar que los pasajeros bajaran del remolque cuando tuvo lugar el siniestro. Jerry Hire, un vecino que estaba en el camión con el padre de Rowan, describió el accidente como "la cosa más difícil por la que he pasado".
La familia agradeció los gestos de "amor, apoyo y oraciones" después de su muerte y realizó una vigilia con velas el domingo frente a la escuela donde fue atropellado. El capitán Tyler Chandler expresó sus condolencias y elogió la respuesta comunitaria tan "cariñosa". Tennessee Highway Patrol se ha hecho cargo de la investigación.
Después de la muerte de Rowan, una página de Facebook dedicada a la familia ha conseguido más de 55.000 dólares en donaciones. Además, otra campaña en GoFundMe ha recaudado más de 10.000 dólares para ayudar a pagar el funeral y los costes médicos.