Matthew Radar, un niño de cuatro años de Kentucky, Estados Unidos, ha fallecido después de coger de la cocina de su casa un bote de canela en polvo e ingerirlo en grandes cantidades. El pequeño trepó hasta el armario en el que la madre guardaba las especias, y comenzó a ingerir la canela de forma abusiva, provocándo que se quedara sin respiración y que entrará en un colapso respiratorio.
A pesar de que fue trasladado rápidamente a un hospital, las autoridades sanitarias no pudieron salvar la vida del pequeño Matthew Radar,según recoge el tabloide británico Mirror. "Comenzó a asfixiarse. Parecía que le estaba dando una taque, y simplemente se derrumbó", asegura Brianna, la madre del menor.
Tras este incidente, la madre quiso referirse a un reto que se ha vuelto viral en las redes sociales desde hace ya varios años, y es el 'reto de la canela', el cuál consiste en tomar una cantidad considerable de la especia y aguantar con la boca cerrada. La especia acaba buscando un orificio por el que salir, siendo esto algo peligroso. "Todos los niños hacen el 'reto de la canela'. No piensan en que puede hacerles daño", asegura Brianna.