El producto químico que ahora se inyecta se llama gonadotropina coriónica humana. Se trata de una hormona del embarazo humano, y se supone que promueve la pérdida de peso, pudiendo llegar a adelgazar hasta unos 13 kilos al mes, informa Metro.
Sin embargo, este método no está probado médicamente para la pérdida de peso. El profesor Bu Beng Yeap de la Sociedad Endocrina de Australia ha manifestado su postura totalmente contraria a esta práctica.
Si intenta comprar este producto en internet, el plan de dieta asociado implicará que en las primeras semanas se deberán comer 500 calorías al día, la mayoría proteínas, una dieta excesiva que lograría hacer perder peso a cualquiera sin necesidad de inyectarse hormonas del embarazo.
"La gente lo pide", dijo el doctor Jeremy Cumpston a Harper's Bazaar, "pero yo sólo lo prescribiría al 20 por ciento de los pacientes a lo sumo. Tengo que estar muy familiarizado con la historia de un paciente antes de considerarlo. Y sólo permitiré que se use durante un período de 12 semanas", asegura.
Así las cosas, Jade Larue West probó la dieta ella misma, y escribió un ensayo personal donde detalló lo terrible que fue la experiencia. Escribió: “No tardé mucho en darme cuenta de que esta dieta era un terrible error. No solo falló, sino que también me dejó peor que cuando empecé. Y todo el tiempo que estuve con la dieta, estaba infeliz”.
Además asegura que le generó una relación malsana con la comida que le hizo propensa a comer en exceso en lugar de controlar sus porciones y comer sólo cuando tenía hambre, como antes de comenzar con la dieta.
Asegura que le tomó bastante tiempo desarrollar hábitos alimentarios saludables y recuperar su peso habitual. “Además de ser peligroso y no saludable, no produce resultados que duren”.