Pau Donés ha muerto a los 53 años víctima del cáncer. Han sido más de cuatro años luchando contra el cáncer, sin miedo y con fe. Pau Donés se sobrepuso al primer cáncer diagnosticado en 2015 y llegó a tener los marcadores a cero. Sí, aunque en abril de 2016 anunciaba que estaba "limpio" de la enfermedad, esta volvió. Como él decía ese cangrejo no le dejaba en paz.
"La família Donés Cirera comunica que Pau Donés ha fallecido el día 9 de junio de 2020 a consecuencia del cáncer que padecía desde agosto de 2015. Queremos agradecer al equipo médico y todo el personal del Hospital de la Vall de Hebrón, Hospital Sant Joan Despí Moisès Broggi, ICO (Institut Català d'Oncologia), Servei de Paliatius del Hospital de Viella y al VHIO (Instituto Oncológico de la Vall Hebrón) todo su trabajo y dedicación durante todo este tiempo. Pedimos el máximo respeto e intimidad en estos momentos tan difíciles" han sido las palabras que han utilizado sus compañeros para avisar por redes sociales del fallecimiento del artista. Allí la pena ha sido unánime.
Hace poco volvía a cantar para darnos esperanza, para dar las gracias a los sanitarios por salvar tantas vidas. Fue en marzo de este año cantando en el balcón de su domicilio barcelonés, donde cumplía el confinamiento, bajo el tema "Los ángeles visten de blanco". No pudo ser la suya aunque se dejaron el alma en ello. El cáncer de colon, que surgió en 2015, se lo llevó con 53 años.
El autor de canciones que tararearemos de por vida como 'Depende', o 'La Flaca', 'Bonito' con su grupo Jarabe de Palo, se ha marchado dando una lección sobre cómo afrontar la enfermedad, sin miedo, con valentía. Como siempre afrontó la enfermedad. Lo hizo cuando recibió un nuevo mazazo, la vuielta del cáncer con su gira de presentación de su undécimo disco, "50 palos", que coincidió con la publicación de su autobiografía "50 palos... y sigo soñando", en referencia a sus 50 años cumplidos.
En su faceta de compositor, escribió temas que cantaron Celia Cruz ("Dos días en la vida"), Ricky Martin ("Cambia la piel"), Alanis Morisette ("Everything") o que interpretó a dúo, con Leiva ("Vecina") y Crissie Hynde ("Cry").
Pau no dejó de hacer canciones ni de vivir con una sonrisa su enfermedad, ni de saborear todos los nuevos momentos con su familia. "Me perdí la infancia de mi hija. El año que nació estuve dos meses en casa" diría Pau, que decidió alejarse de los escenarios e irse a vivir con ella a California. Se enfrentaba a las recaídas con naturalidad, sin autocompasión. Lo demostró cuando el cáncer volvió. Y lo escribió, como si de una canción se tratara.
"Llevaba un año limpio. Los marcadores tumorales a cero. En los escáners no se veían tumores. El cangrejo estaba tan dormido que incluso llegué a creer que me había curado. Mientras tanto seguía preparando nuestra vuelta al ring. Un disco, una gira y un libro. 2017 iba a ser un año glorioso. De pronto recibo una llamada del hospi. En el último control los marcadores han subido. Me hago un TAC (scaner) y escondido en el peritoneo encuentran un pequeño tumor. ¡Oh, oh! Malas noticias. Pasé un par de días pensando. El cangrejo volvía a despertarse. ¿Qué consecuencias podría tener eso? ¿Cómo iba a afectar a nuestros planes?"
Llevaba un año y medio en casa, un año y medio estupendo, disfrutando del otoño, del mar, de la familia, de paseos por la montaña inexplicables". Estas sensaciones provocaron que "las ganas de volver a pisar un escenario se convirtieran en una necesidad de primer orden". "Después de darle muchas vueltas, llegué a la conclusión de que no iba a dejar que el cangrejo me volviera a apartar de la música. Me daba igual. Pasara lo que pasara, dijeran lo que dijeran, en 2017 Jarabe volvía a los escenarios", confesaba el cantante.
"Tenía un plan y el cangrejo no me lo iba a joder. La jefa (así llamo a la doctora Élez) me dijo que ni se me ocurriera dejar mis planes de lado. Que a por ello, con cangrejo o sin cangrejo, con quimioterapia o sin ella". "Y así lo vamos a hacer. Estrenaremos disco en breve, estrenaremos también libro y a partir de mediados de marzo empezamos con los conciertos. Conciertos grandes, con toda la banda, conciertos más íntimos, en teatros y auditorios, a piano, violonchelo, contrabajo y voz. Habrá días que estaré al 100%, otros que no tanto".
"No pasa nada, porque ahí estaré cuando levanten el telón, en uno de los lugares en donde mejor me siento, en uno de los lugares donde más me gusta estar, firmes y a la orden, cantando para ti. Volveremos a compartir nuestras vidas, cosa que con gusto hacemos desde hace muchos años".
"Y al cangrejo, como vengo haciendo desde que le conocí, le dedicaré solo 5 minutos al día, aunque eso sí, durante las actuaciones me acordaré de María, de Andrés, de Lino, y pensaré en todas aquellas personas a las que el bicho se llevó por delante. Y también en todas aquellas que como yo lo siguen toreando día a día. A todos van dedicados los conciertos de este año", confesaba.
Este martes 9 de junio será recordado por todos, pero en especial en el ámbito de la música. Un grande, incansable, se ha ido demostrando nuevamente su fortaleza ante la complicada situación en la que se encontraba. Durante este confinamiento se emitió su último trabajo 'Eso que tú me das' donde podíamos ver a Pau Donés muy deteriorado físicamente, pero con una fuerza física que nos impactaba. El cantante nunca quiso dejar de hacer lo que más le gustaba, alzar la voz para expresar con las letras de sus canciones sus sentimientos más íntimos.
"Tragas o escupes", el nuevo álbum de Jarabe de Palo, acumulaba 772.000 escuchas en Spotify desde el 26 de mayo, mientras que el single "Eso que tú me das" llegaba a las 3.153.000 visualizaciones en YouTube en 11 días, según datos de la discográfica Tronco Records. "Tragas o escupes" ha estado desde su publicación "en primer y tercer puesto en las listas de iTunes".
"Tragas o escupes", disponible en plataformas virtuales desde el 26 de mayo, saldrá a la venta en formato físico en tiendas FNAC a partir del 29 de junio. El músico Pau Donés, cantante de Jarabe de Palo, siempre ha recibido muestras de apoyo desde la publicación de "Tragas o escupes" y el sencillo "Eso que tú me das", como la de un niño vecino suyo, Yue, que le ha dejado una carta que Jarabe de Palo ha compartido en sus redes sociales.
"Hola Pau. Soy Yue, tu vecino de enfrente y quiero escribirte estas líneas para decirte que siempre me han gustado tus canciones y cómo las cantas. Adiós", dice su pequeño vecino en esta corta y emotiva carta, que Donés ha compartido con el mensaje: "Esta tarde mi vecino y amigo Yue me ha mandado este regalito. Muchas gracias guapetón".
El nuevo álbum ha sido alabado también por personalidades como Mikel Erentxun, que compartió en su Twitter un enlace a "Eso que tú me das", junto con el mensaje: "Muy emocionante y muy emocionado", o el actor Dani Rovira, que hizo lo mismo junto al texto: "Esto de Pau Donés. Lo importante", acompañado del emoticono de un corazón.
También reaccionaron a la publicación del álbum músicos como Alfred García o la banda italiana Modà, con quien Pau Donés colaboró en 2014, que han dejado en la cuenta de Instagram de Jarabe de Palo comentarios felicitando a la banda por el nuevo álbum. "Eso que tú me das" es un single que Pau Donés publicó para agradecer a sus seguidores: "La generosidad que habéis demostrado conmigo, y que siempre ha sido mucha más de la que realmente me he merecido", como expresó Donés en un comunicado.
Siempre decía Pau Donés eso de "Vuelvo". Volvía Pau "porque la música de nuevo a mi cabeza ha vuelto", "para encontrarme con mi gente y aquí quedarme siempre", "porque pisar el escenario es en lo único que pienso", y para hacer "lo siempre he querido hacer". Y lo hacía con un mensaje que parecía profecía.
"Si la vida te da palo, dame una guitarra que te canto una canción
Si la vida te da palo, que escribí unos versos pa' alegrarte el corazón.
Si la vida te da palo, traigo una receta que te hará sentir mejor.
Si la vida te da palo, Jarabe de Palo",
Pau Donés se convirtió en un referente para muchos enfermos de cáncer. Una de sus cartas fue bálsamo y ánimo para muchos:
Para que nos vamos a engañar, con todo esto que me está pasando de vez en cuando aparece un mal día. Por ejemplo, hoy. Comparto este miércoles 30 de septiembre de 2015 con vosotros, a pelo, tal como lo estoy viviendo, porque a lo mejor queréis saber como son mis días chungos, pero sobretodo porque el compartirlo me alivia.
Hoy estoy triste. Triste porque tengo cáncer. Porque no me encuentro bien. Porque los míos están tristes. Porque tengo la cabeza a tope y el cuerpo a cero. Porque esta mañana no tengo ganas. Porque tenía muchos planes y de repente se esfumaron. Porque voy a estar un año sin poder nadar, sin pisar la nieve, sin subirme a la moto, sin viajar, sin tocar….Y porque por si fuera poco, ayer me dijeron que el frío, que es de lo que más me gusta en el mundo, con la quimioterapia se va a convertir en mi principal enemigo.
La semana que viene empiezo el tratamiento y estoy cagado de miedo.
Hoy no estoy muy animado, la verdad. La pregunta de ¿Cuánto me queda? ha vuelto a mi cabeza, y aunque todo apunta a que mucho, con el cáncer nunca se sabe.
Hoy estoy hasta los huevos de estar enfermo, porque si no lo estuviera, mañana viajaríamos a Lima y luego empezaríamos una gira por los EEUU. Y me enceraría la tabla de snowboard, y me iría a dar una vuelta con la moto, y los míos no estarían tristes, y…
Hoy tengo un día de mierda, lo reconozco. Aunque también reconozco que tengo derecho a tenerlo. No pasa nada.
Procuro evitarlos, pero con todo esto del cáncer de vez en cuando me viene el bajón. Hoy lo tengo, y quería contaros lo que me pasa. Ya veis queridos, no todos los días son de color de rosa. Hoy tengo un día gris, aunque sé positivamente que mañana, cuando me levante, todo volverá a ser azul como siempre.
P.d.: Y otra cosa, a este puto cáncer le voy a dar de hostias hasta en el carnet de identidad. ¡He dicho!