Lisa Urso, una mujer de Chicago (EEUU) de 52 años, ha fallecido en el porche trasero de su vivienda tras ser atacada por al menos uno de sus perros al que había adoptado antes de poder escapar de él. La víctima presentaba heridas muy severas en brazos, piernas y torso.

El cuerpo de Urso presentaba numerosa heridas y la ropa de la mujer estaba destrozada como consecuencia de los mordiscos, según afirmó el forense del condado de Lake, Howard Cooper. Un amigo la encontró en el porche trasero, donde habría acabado tras intentar huir del animal.

El perro, un bulldog francés que adoptó, fue criado para pelear. El mes anterior al ataque mortal, mordió hasta dos veces al novio de Urso, por lo que la pareja le llevó espués de lo cual fue llevado al Departamento de Cuidado y Control de Animales y puesto bajo una cuarentena de 10 días, según publica ‘National Post’.

Durante ese tiempo, según afirma Robin Van Sickle, gerente del programa del departamento, a 'People' no mostró ningún comportamiento de agresividad por lo que Urso lo llevó de nuevo a su casa. Estaba convencida de que los ataques no se repetirían. “Ella realmente quería a ese animal”, expresa Van Sinkle.

"Realmente no piensas que suceda con una raza de perro más pequeña, pero olvidamos que los animales pueden ser poderosos", dice Cooper, especificando que "este animal tiene mucha fuerza en la mandíbula".

Urso era una amante y activista de los animales. A menudo recaudaba dinero para organizaciones como la Sociedad Estadounidense para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales. Además de este, tenía otro bulldog francés y una mezcla de border collie.

Aunque encontraron restos de sangre en los dos bulldogs, se cree que solo uno de ellos la atacó: el que tenía antecedentes de otros ataques. Sin embargo, y a la espera de que se aclaren los hechos, los tres perros han sido trasladados a un refugio. Los otros dos perros, que no han mostrado signos de violencia, podrán ser adoptados o por la familia de Urso o por cualquier otra persona. El perro que atacó a Urso con toda probabilidad será sacrificado.

Mientras tanto, la Policía investiga qué pudo desencadenar el ataque del animal. Según fuentes del refugio, el hogar era idóneo para los perros. Pero, según un comandante policial “hay muchas circunstancias que podrían estar involucradas” en esta “trágica situación”.

La ley de Illinois obliga al propietario de un perro designado como peligroso por una investigación de la agencia de control de animales a pagar una multa de 70 dólares, a hacer que el perro sea microprocesado y esterilizado o castrado.

Si este llega a considerarse tres veces como peligroso, se considera ilegal tenerlos a menos que se mantengan en un recinto cerrado la mayor parte del tiempo.