Conmoción en Tarifa ante lo que parece ser una nueva víctima del coronavirus en la que se vuelve a poner de manifiesto el drama de la soledad en muchos confinamientos. Tenía 58 años y era celadora del hospital Punta Europa de Algeciras, (Cádiz). Los bomberos han encontrado su cuerpo sin vida tras acceder a su vivienda, en Tarifa, tras pasar varios días sin que contestara a las llamadas de sus allegados. La fallecida tenía Covid-19 y se había autoaislado tras dar positivo, según ha adelantado el diario www.tarifaldia.es. Será la autopsia la que determine si la muerte se debe o no al coronavirus.
Los bomberos recibieron la llamada este lunes pasadas las ocho de la noche alertando de la apertura de una vivienda situada entre las calles San Sebastián, Callao y San José. Al desplazarse hasta el inmueble, supieron que se trataba de una mujer con Covid-19. Al seguir sin contestar, los bomberos derribaron la puerta para facilitar la entrada al equipo sanitario. Una vez dentro encontraron su cuerpo sin vida y certificaron su fallecimiento. Además de los bomberos, intervinieron la Policía Local, la Guardia Civil y personal del centro de salud de Tarifa.
En el caso de que se confirme que esta muerte se debe al Covid-19, serán seis los fallecidos en Tarifa con coronavirus. Este municipio suma ya 121 casos según los datos facilitados por la Junta de Andalucía este lunes. 59 se han detectado en las últimas dos semanas y 18, durante el fin de semana pasado.
De confirmarse que estamos ante una muerte del coronavirus en un confinamiento en soledad se estará poniendo encima de la mesa otra de las lacras de esta enfermedad.
La mortalidad y soledad son los principales miedos de las personas mayores ante el Covid-19, la enfermedad que provoca el nuevo coronavirus, según asegura el geriatra de La salud, José Botella. "Lo que más vemos en los pacientes mayores que tratamos es miedo a la mortalidad porque a diferencia de la primera ola de la pandemia en marzo, ahora los pacientes geriátricos han visto cómo el Covid-19 se ha cebado en Residencias de personas mayores en toda España. Pero también les inquieta y les provoca ansiedad el miedo a la soledad, ya que muchos de ellos pasaron casi tres meses aislados y solos de marzo a mayo y no quieren volver a pasar por esta experiencia de nuevo", ha comentado el experto.
Y es que, tal y como ha recordado, ha habido "mucha gente sola" tanto en casa como en los hospitales y en las residencias. Una soledad que agrava mucho la salud de los mayores, por lo que ha destacado la importancia de intentar evitarlo si se produce un nuevo confinamiento. "Habrá que buscar modos de que podamos evitar el aislamiento. Una de las secuelas importantes que estamos viendo son las derivadas de la soledad", ha avisado el experto.
Por otra parte, los expertos aseguran que los parientes más jóvenes de la familia pueden desempeñar un papel vital en el fomento de las relaciones entre los ancianos y sus familias. Y es que, los nietos a menudo perciben a sus abuelos como "extraños o aburridos", cuando deberían considerarlos como una "fuente valiosa de sabiduría y diversión".
"Tenemos que sacar provecho a la generación del Internet y del teléfono móvil y, que utilicen estos medios para generar una rutina en los mayores, llamándoles a diario a la misma hora e intentando que se sientan importantes para ellos. Esto a su vez, contribuirá a trabajar cognitivamente las capacidades de nuestros mayores, viéndose estimulado mentalmente por las interacciones con otras personas", ha zanjado Crespo.