La estadística es sorprendente: el año pasado fallecieron 400.000 personas. Casi 25.000 más que el año anterior. Hay que remontarse a la posguerra para encontrar una cifra tan alta de muertes. La causa parece estar en la gripe que hizo estragos en los meses de febrero y marzo. Fallecimientos de mayores de 65 años a los que el virus gripal, complicó letalmente su enfermedad crónica. Son datos del Instituto nacional de estadística que también hablan de nacimientos. Cada vez hay menos desde hace cuatro años