Maurice 'Mo' Robinson, el conductor del camión en el que se encontraron 39 cadáveres en Essex, en el este de Londres, está "involucrado en una red mundial que facilita el movimiento de grandes cantidades de inmigrantes ilegales al Reino Unido", según ha apuntado el fiscal Iguyovwe Oghenerouna.
Este joven de 25 años, natural de Co Armagh (Irlanda del Norte), cuya pareja espera gemelos, no presentó ninguna súplica y solo habló ante el tribunal para confirmar su nombre, dirección y fecha de nacimiento. Ya se encuentra detenido y es el principal sospechoso de la mayor tragedia migratoria del país desde el año 2000. Se le imputan 39 cargos de homicidio, dos cargos de tráfico de personas y uno de lavado de dinero.
Robinson se pronuncia fanático de los camiones (se define a sí mismo como camionero) en todos sus perfiles de redes sociales. En sus publicaciones muestra el vehículo en el se hallaron los cadáveres. Lo denominó el Expreso Escandinavo o el Expreso Polar. Fue estudiante de la Southern Regional College, donde estudió mantenimieno y reparación de vehículos ligeros.
La ruta que realizó se está reconstruyendo, a medida que avanzan los estudios. En las primeras horas se había dicho que había entrado al Reino Unido por Bulgaria, pero ahora se confirmó que ingresó por Zeebrugge (Bélgica). Habría llegado a Purfleet, a 25 kilómetros del este de Londres, a través de esa localidad. Las fuerzas de seguridad expresaron que la cabina del camión tiene origen en Irlanda del Norte y el contenedor está registrado en Bulgaria. Frente a esta información, el Ministerio de Exteriores de Bulgaria brindó información clave: el vehículo fue registrado en la ciudad de Varna, a nombre de una empresa propiedad de una ciudadana irlandesa.
Las víctimas (8 mujeres y 31 hombres), que parecen ser principalmente de Vietnam, viajaban con pasaportes chinos falsos proporcionados por traficantes de la región de Fujian (este de Hong Kong). El inspector jefe de detectives Martin Pasmore dijo que se recuperaron "muy, muy pocos" documentos de identidad y que la policía compartirá huellas digitales con las autoridades vietnamitas en un intento por identificar los cuerpos.
Todavía no se sabe cuándo entraron las víctimas en el remolque, en el que la temperatura es de -25ºC. Los cuerpos podrían haber estado congelados en el camión durante varios días cuando fueron descubiertos el miércoles en Essex, después de que el contenedor cruzara el Canal de la Mancha a través de puntos críticos de refugiados.
Los familiares señalaron que la mayoría iban a trabajar en salones de belleza. VietHome, una organización británica que trata de ayudar a los residentes vietnamitas con sede en el Reino Unido, indicó que le habían enviado 20 fotografías y nombres de personas que ahora podrían formar parte del 'camión del horror'.