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La Policía ha arrestado a Jeffrey Antonio Langford, de 24 años, sospechoso de la muerte de su madre. El joven, grabó tres vídeos en los que aparece junto al cadáver ensangrentado de la mujer, diciendo que se suicidó, algo que también repitió a los investigadores dando versiones contradictorias.
En la investigación, la Policía ha incluido los tres vídeos que Langford emitió por Facebook Live en los que aparece llorando y diciendo "mamá" antes de mover la cámara y enfocar la cabeza ensangrentada de la mujer muerta. Además de asegurar que no la mató, aunque también dice que no está muerta y que él necesita "terminar el trabajo".
El segundo vídeo también se ve a Langford repitiendo la afirmación de que su madre se suicidó y asegurando que no quería ir a la cárcel.
La policía respondió al aviso de una mujer no identificada que decía que había recibido un mensaje en las redes sociales de Langford en el que le decía que acababa de dispararle a una persona y que iba a quitarse la vida, según ha publicado NewsWeek.
Los agentes llegaron al apartamento de North Salt Lake, Utah, y encontraron el cuerpo de Graciela Laura Holker, la madre de Langford. "En la investigación preliminar dentro del piso, los oficiales encontraron a una mujer adulta fallecida con una aparente herida de bala", según el informe de los agentes. "En investigaciones posteriores se determinó que había suficientes causas probables para arrestar al hombre adulto con cargos de homicidio y obstrucción de la justicia".
En el vídeo final se ve a Langford contando que perdió a su madre el mismo día que perdió a su padre.
Cuando la policía llegó al lugar, notaron que Langford parecía estar borracho. Les dijo que él y su madre habían estado bebiendo y que ella había tomado un sedante. Después dio varias versiones sobre lo ocurrido algo que levantó las sospechas de los investigadores.
Además, en el informe policial, los agentes escribieron que aunque "la pistola estaba en la mano derecha de la víctima no era consistente con un suicidio". Una búsqueda en la escena reveló que la pistola tenía tres cámaras vacías, y se encontraron tres casquillos de bala usados en la habitación de Langford.
Según la declaración jurada, Langford primero negó haberle disparado a su madre, luego le dijo a la policía que se había disparado a sí misma, pero que todavía estaba viva y con dolor, por lo que disparó un segundo tiro para rematarla.