Miles de personas han participado este sábado en la manifestación celebrada entre la localidad vasco francesa de Hendaya y la guipuzcoana de Irún contra la cumbre del G7 que se celebra hasta el lunes en Biarritz (Francia). La marcha, convocada por las plataformas Alternatives G7 y 'G7EZ!', ha discurrido bajo el lema 'No al G7, construyendo otro mundo', sin que se produjeran incidentes.
La movilización, a la que han asistido 15.000 personas, según los organizadores, y 9.000, según prefactura francesa, ha comenzado, entre aplausos de los asistentes, sobre las 11.15 horas desde el puerto de Hendaia con una pancarta con el lema: 'No al G7, construyendo otro mundo', en castellano, euskera y francés. Durante el transcurso de la movilización ha habido presencia policial a ambos lados de la frontera.
Los manifestantes portaban banderas de sindicatos, ikurriñas, banderas de Navarra y feministas, así como carteles contra el cambio climático y a favor de personas refugiadas, entre otras reivindicaciones. Un camión con música en directo ha acompañado la movilización.
Entre los asistentes, se encontraban la portavoz de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Mertxe Aizpurua, el líder de Sortu, Arkaitz Rodríguez, la portavoz de 'G7EZ!', Anabel Sanz, y el representante de Alternatives G7, Aurelie Trouvé.
Sanz ha calificado de "éxito rotundo" la contracumbre celebrada entre Irún y Hendaya, en la que, según ha apuntado, han participado unas 6.000 personas de numerosos movimientos y agentes sociales de todo el mundo para denunciar el encuentro de Biarritz.
"Las potencias del mundo están, de nuevo, tratando de dirigir el horizonte del planeta en beneficio de sus intereses, y no hay suficiente planeta para saciar las ansias capitalistas de este sistema, que quiere acabar con el planeta, seguir profundizando en las desigualdades y que pretende generar diferentes categorías de seres humanos, mediante fronteras y esquilmando el planeta", ha apuntado.
A su juicio, en la contracumbre se ha demostrado que "están a favor de alternativas, que las hay, también en Euskal Herria, un montón de propuestas para acabar con el sistema patriarcal, para lograr la acogida a personas migrantes y refugiadas, y para lograr un desarrollo sostenible con soberanía alimentaria".
Asimismo, ha destacado "la masiva" manifestación de este sábado, en la que se han visto "todos los colores de todas las organizaciones y luchas que han tomado parte en la contracumbre". "No vamos a permitir que este sistema siga adelante", ha apuntado. También ha considerado que, si tienen que "bunkerizar" la cumbre de Biarritz, "será que están tan alejados del pueblo, que cada vez se parecen más a los señores feudales".
En cuanto a la 17 detenciones anoche de activistas antiG7 fuera de un campamento de Urrugne, ha afirmado que "había un consenso de resistencia no violenta y para que la contracumbre se desarrollase de forma pacífica y tranquila, y la acampada también".
No obstante, ha apuntado que "es difícil mantener la protesta tranquila con el nivel de bunkerización y de ocupación casi militar que se está dando estos días". Según ha asegurado, lo ocurrido ayer se solucionó y las actividades del campamento prosiguieron con normalidad, tras lograr que la Policía "se replegara".
A la altura del puente fronterizo de Santiago, se ha llevado a cabo una acción simbólica en la que varios 'zanpanzar' han roto entre bailes unas pancartas en las que se leía 'fronteras impuestas a los pueblos'. A continuación, se han dirigido hacia la explanada del exterior del recinto ferial Ficoba, donde los portavoces de las plataformas convocantes han leído un comunicado en euskara, francés y castellano.
Tras la actuación de 'txalapartaris' y enviar un "abrazo solidario a todos los pueblos que luchan por su libertad", así como a "los presos políticos", se ha denunciado, a través del manifiesto final de la 'contracumbre', que "es posible resistir a este sistema que destruye las bases de la humanidad" y desarrollar "alternativas" a la "globalización neoliberal" desde los territorios y comunidades que "priorizan la cooperación ante la competición, los bienes comunes y los derechos humanos ante los beneficios privados; la igualdad y la diversidad ante el éxito individual y ante la uniformización cultural".
Además, los portavoces de G7Ez! y Alternatives G7 han apostado por "alternativas que construyen territorios más unidos, solidarios y mejor equipados para defendernos ante la mercantilización de nuestras sociedades y nuestras vidas, hacer frente a la deslocalización y la puesta en competencia de pueblos y personas, a la destrucción de la naturaleza y de las culturas populares".
A ello, han añadido que sus propuestas permiten a los ciudadanos "reapropiarse del ejercicio de la democracia, reconectar con el compromiso político, tomar consciencia de su propio poder" y han urgido la puesta en marcha de "alianzas y estrategias que permitan invertir lo antes posible" el curso de la "aceleración y agravamiento de los daños sociales, ecológicos y democráticos causados a escala planetaria por la ofensiva neoliberal".