Amanda Lanners, madre de cuatro hijos, le está dando el pecho al más pequeño, pero en solo dos días ella produce casi dos litros y medios, según publicó la CNN.
Eso es demasiada leche para su hijo por lo que generalmente la congela. Sin embargo, en ocasiones su producción de leche materna supera la capacidad que tiene para conservarla.
Amanda Lanners no quiso tirarla y que se desperdiciara; ella, con cuatro hijos, sabe que muchos bebés no pueden ser amamantados, sobre todo, a veces cuando están hospitalizados.
La mujer llamó al principal hospital de Sioux Falls, para saber cómo podía ayudar a estos bebés que se encuentran en la UCI de neonatos y necesitan la leche materna para adquirir anticuerpos.
Una experta del hospital le explicó que las donaciones de leche materna siguen el mismo proceso que las de sangre.
La donante debe rellenar un formulario de unas 40 páginas para saber sobre su salud, si estaba tomando algún medicamento, además de someterse a una analítica.
Solo después de que se completa este proceso, que dura unas tres semanas, se acepta la leche materna donada.
Amanda Lanners, mientras tanto, seguía sacándose leche hasta que llegó a llenar dos congeladores, que sirvieron para alimentar a 2.000 bebés, según le explicaron.
A pesar de que hizo la donación hace dos meses, un representante de Avera McKennan dijo que el hospital acaba de hacer pública la noticia.