Según informa el Diario Montañés, la madre tras ver que su hija no llegaba del colegio salió a buscarla al centro, donde le dijeron las amigas de la menor que ya se había marchado. La mujer volvió a casa y cuando la niña apareció, dos horas más tarde, reaccionó dándole una bofetada.
Uno de los vecinos al ver la situación, denunció a la policía local la agresión y estos pusieron en marcha el protocolo de violencia doméstica. Cuando los agentes se personaron en el domicilio, la madre afirmó: “Es verdad, me puse muy nerviosa”.
La mujer fue detenida y la niña trasladada a la Residencia de Cantabria para evaluar las lesiones, donde vieron que “no tenía nada”. La madre fue puesta en libertad tras esto y el juez archivó la causa al día siguiente. Por el momento la niña se encuentra viviendo en casa de su tío materno.