El juez ha sido firme en cuanto a Broquel King, una mujer que dejó a sus tres hijos, de cuatro y dos años y otro de seis meses, encerrados dentro de un coche a baja temperatura mientas ella compraba en una tienda cercana.
Sobre ella ha caído una dura acusación. Se le imputan delitos de abuso criminal en primer grado, tres cargos por poner en peligro a personas injustificadamente y un cargo de conducta desordenada, según informa Metro.uk.
Debido a estos hechos, la mujer ingresará en prisión, pero no en una cualquiera. King, de 28 años, será enviada a la cárcel de Louisville, en Kentucky, Estados Unidos, la cual es conocida por albergar dentro temperaturas gélidas. Según informa WFPL, los reclusos de dicha prisión soportan temperaturas muy bajas, alrededor de los 3 grados, por lo que se ven obligados a convivir con mantas y bolsas de agua caliente durante el invierno.
La joven fue arrestada después de dejar a sus tres hijos encerrados en su propio vehículo sin calefacción y con las ventanas abiertas mientras realizaba unas compras en una tienda cercana. En el interior del coche se llegaron a alcanzar 9 grados bajo cero.
Los pequeños, incapaces de salir del vehículo, fueron vistos por los vecinos temblando dentro del coche y fue entonces cuando alertaron a los servicios de emergencia.
Cuando la joven regresó al coche, afirmó a los agentes que solo se había ausentado durante cinco minutos, pero desde que llegó la policía ya habían pasado 20.