Santiago Camaño comenzó su adicción al juego con 14 años. Sin darse cuenta se enganchó y arruinó su adolescencia. Ahora tras años de terapia nos cuenta su testimomio. No es un caso aislado, entre el 25 y el 30% de menores reconoce haber apostado y jugado online alguna vez. Los expertos piden una regulación.
Al principio eran timbas de póker con sus amigos. Luego tentó a su suerte y se enganchó de manera enfermiza al juego online. En apenas unos meses llegaron las primeras las primeras mentiras. Según Camaño falsificó las notas "para poner que había suspendido dos para poder quedarme en verano con el ordenador tranquilamente para decirle a mi madre que estaba estudiando y no tuviera ningún tipo de sospecha".
Pero no es un caso aislado. El psicólogo, Antonio Rial dice que entre "el 25 y el 30% de los menores reconocen haber apostado alguna vez en su vida". Los expertos piden regulación y observación. Porque todo cuidado es poco para prevenir lo que muchos ya definen como la gran epidemia del siglo XXI.