Nuevo procedimiento elaborado por la Guardia Civil para localizar desaparecidos en zonas rurales

  • Habrá una aplicación para móvil para apoyar los dispositivos de búsqueda

  • Las primeras horas de desaparición con las más importantes

  • No es necesario esperar 24 horas para ponerlo en conocimiento de las fuerzas de seguridad

La Guardia Civil, con ayuda de la asociación SOS Desaparecidos, ha puesto en marcha un nuevo protocolo para la búsqueda de personas desaparecidas en zonas no urbanas, que incluirá una herramienta informática y una aplicación para móvil que apoyen a los dispositivos de búsqueda.

El objetivo de esta técnica es aumentar los casos de éxito en grandes áreas rurales que son demarcación de Guardia Civil, que cuentan con la dificultad añadida de la despoblación. Este protocolo busca activar de manera más rápida la búsqueda y localización de las personas desaparecidas en cuanto se reciba la denuncia. La Guardia Civil quiere ser más eficaz a la hora de movilizar los recursos disponibles, especialmente durante las primeras horas de la desaparición.

Desde el convencimiento de que el tiempo en una desaparición es "crítico" y, por tanto, "las primeras horas son las únicas horas", la Guardia Civil, bajo el paraguas de la instrucción de la Secretaría de Estado de Seguridad y del Centro Nacional de Desaparecidos, creó un grupo de trabajo para diseñar su propio protocolo.

Además, esta actuación busca unificar las actuaciones en casos de desaparición en todas las comunidades autónomas y poner a disposición del operativo todos los medios de la Guardia Civil, además de potenciar la coordinación con otras fuerzas de seguridad y los distintos servicios públicos y privados que participen en la búsqueda.

Y todo ello apoyado por una herramienta informática que la Guardia Civil tendrá operativa en tres meses y que permitirá la visualización de la zona de la desaparición y la geolocalización de todos los participantes en el dispositivo de búsqueda.

A la hora de poner en marcha estos dispositivos de búsqueda se tendrá en cuenta sobre todo el perfil de la persona desaparecida. La primera clasificación de estos perfiles tiene que ver con el tipo de desaparición, clasificadas en voluntarias, involuntarias y forzosas. Además de esto, también se tendrá en cuenta el análisis de riesgo y el contexto de la desaparición.

El año pasado la Guardia Civil tuvo conocimiento en su ámbito de actuación de 6 012 nuevos casos de desapariciones, de las que 4 194, es decir, un 69,7 por ciento, fueron resueltas bien por la aparición o por localización de la personas.

En suma, se trata de dar una respuesta integral y homogénea en la búsqueda e investigación de las desapariciones. Han concluido diciendo que, "los desaparecidos son de todos".