Lina Álvarez, la médica gallega que se quedó embarazada a los 62 años y dio a luz a una niña la pasada semana, ha sido dada de alta este martes en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA).
La mujer abandonó a las 13.45 el hospital por su propio pie y con su bebé en manos. "Imposible sentirme más feliz en estos momentos. Estoy agradecida a la vida por esta cosita tan linda", expresó a la salida del centro hospitalario, según recoge La Voz de Galicia.
Varias mujeres de toda España han llamado a la sexagenaria para que le informe de la clínica en la que le practicaron la fecundación, pero ella mantiene el secreto, aunque anima a las mujeres de edad avanzada a que tengan hijos si lo desean.
Doctora de profesión y natural de lugo, creó una enorme polémica y un gran debate social por su decisión de seguir adelante con el parto. Ahora, se ha convertido en una de las madres de mayor edad del mundo. La niña nació mediante césarea, y pesó 2 kilos 375 gramos al nacer.
Lina tuvo su primer hijo a los 34 años, el cual sufrió daños muy graves, según explicó, por una amniocentesis, una prueba prenatal en la que se extrae una pequeña muestra del líquido amniótico que rodea al feto para analizarla. Tras ello, tuvo otro niño con 52 años, y ahora, a sus 62, ha dado a luz a su primera hija.