La escasez de equipos de protección frente al coronavirus es una triste realidad en muchos hospitales y centros sanitarios, cuyos profesionales no tienen a su disposición el material necesario para protegerse. En el Hospital Universitario de Nuestra Señora de Candelaria, en Tenerife, una limpiadora ha sido detenida por, presuntamente, robar equipos de protección individual y luego venderlos.
La mujer se llevaba mascarillas, guantes de vinilo y gel hidroalcohólico de su lugar de trabajo y luego los vendía en packs. La Policía Nacional la detuvo cuando, supuestamente, iba a hacer una de las entregas, ya que llevaba encima varias mascarillas.
En la rueda de prensa donde la Policía Nacional ha informado de estos hechos, las autoridades han explicación que esta situación es un reflejo de “cómo algunas personas se aprovechan de la situación de emergencia que estamos viviendo para obtener réditos económicos”.