El agente, de uniforme, que también estaba comprando en la tienda no apreció el gesto de afecto y las reprendió diciéndoles que "hagan eso en otro lugar".
Courtney Wilson y Taylor Guerrero abandonaron la tienda pensando que había sido un incidente sin importancia, pero se dieron cuenta que el policía las seguía, según ha publicado ABCNews.
El agente les dijo que les iba a prohibir entrar a otras tiendas de alimentos a causa de su conducta. Una de las jóvenes decidió llamar a una comisaría para avisar que estaban siendo acosadas.
El policía, sin embargo, agarró a una de ellas, mientras la otra intervenía colocándose entre ambos. Guerrero se cayó y se golpeó la cabeza con un mostrador y el policía le propinó un puñetazo en la cara, cuando trató de impedir que siguiera empujando a su novia.
Al final, las mujeres terminaron esposadas y cuando llegaron los agentes a los que ellas habían avisado por teléfono estos las acusaron de haber agredido a un policía.
Las dos mujeres pasaron dos días en la cárcel y tuvieron que utilizar el dinero de sus vacaciones en pagar la fianza. Sin dinero han tenido que permanecer en Háwai a la espera de la audiencia ante el juez.
Cinco meses después de este incidente ya son libres de abandonar Háwai después de que un tribunal desestimara el caso penal en contra de ellas.
Courtney Wilson y Taylor Guerrero, a su vez, han presentado una demanda contra la ciudad y el oficial que las agredió. Por el momento, el agente que acumula 26 años de servicio en la policía se mantiene en activo.
El departamento de Policía de Honolulu, ha abierto una investigación sobre lo ocurrido.