El doctor Eric Anderson, del departamento de educación de la Universidad de Bath, que ha llevado a cabo el estudio, ha explicado que el hecho de que "los hombres heterosexuales se besen como signo de amistad es una muestra de lo que ocurre cuando lo homofobia se reduce. En estas universidades, que la homofobia se haya reducido casi hasta la extinción permite a los hombres llevar a cabo conductas que antes eran tabú".
"Los hombres se besan en los clubes universitarios y pubs, delante de sus compañeros, y para muchos es una broma ocasional o un saludo en una fiesta. El beso es un signo de afecto en espacios sociales estudiantiles, un signo de victoria en el campo o de celebración en un nightclub, pero no tiene connotación sexual en ninguno de estos espacios. Parece que la gente más joven está siendo más y más abierta de mente con cada generación", añade.
La investigación del doctor Anderson se ha publicado en el periódico online Archives of Sexual Behaviour. El estudio está siendo ampliado para mostrar cuáles de estas actitudes están determinas por la raza y la clase social.
El estudiante de sociología Adi Adams, ayudante del doctor Anderson en la investigación, explica que "nos dimos cuenta de que más y más hombres se besaban en sus clubs o después de marcar un gol como una forma de celebración, y muchos colgaban fotos de esos besos con los amigos en Facebook. Entonces empezamos nuestra investigación y nos dimos cuenta de que la forma en que los hombres muestran a los otros que están en su círculo de amigos íntimos es el beso".
"En este sentido, los hombres están alcanzando a las mujeres, que utilizan el beso habitualmente como un signo de afecto hacia otra mujer amiga", señala.
Adi, que es heterosexual, añade que "mi primera experiencia besando a un hombre fue en la universidad y me sentí un poco extraño, pero ahora lo veo como un acto normal de amistad".
"No siento que amenace mi masculinidad o heterosexualidad; al contrario, se ha convertido en parte de una masculinidad y heterosexualidad aceptable", indica.
Daniel Eagles, un estudiante de la Universidad de Bath, señala que no tiene problema en besar a sus amigos hombres. "Me siento cómodo besando a mis amigos en situaciones como su cumpleaños o cuando alguien marca un gol o simplemente si estamos echándonos unas risas".
"El contacto físico con tus amigos ayuda a que estén más cerca. He tenido novia durante un año y ella no ha pensado nada raro cuando me veía besar a mis amigos chicos", añade.