El 5 de abril de 2011 Dorel Marcu estranguló hasta la muerte a su mujer, Viorela Moldovan, de 19 años, en su domicilio de Torrejón de Ardoz (Madrid). La víctima estaba embarazada de 5 meses. Según algunos familiares la pareja discutía frecuentemente. El acusado asegura que su mujer le había dicho aquel día que quería dejarle y que no era el padre del hijo que llevaba en su vientre. El hombre, de entonces 21 años, cogió una corbata y asfixió a la joven delante de la hija de ambos, de sólo 3 años. El asesino enseñó después el cadáver de la víctima a sus padres con una cámara web. Desde Rumanía los progenitores del homicida solicitaron a la Policía que detuvieran a su hijo. Hoy ha comenzado el juicio en la Audiencia Provincial de Madrid. La acusación particular pide 25 años de cárcel por un homicidio agravado por aborto. La defensa del acusado solicita su absolución alegando un trastorno mental transitorio.