El terreno dificulta el rescate de Julen
El terreno marca los tiempos y esta noche el rescate volvía a ralentizarse. La perforadora llegaba a una capa de cuarcita. Una roca extremadamente dura que ha llevado a las máquinas al límite. El trabajo se interrumpía hasta que esta mañana la broca ha vuelto a adentrarse en la sierra de Totalán. Ya ha alcanzado los cincuenta y tres metros de profundidad. Solo quedan siete metros pero muchas horas hasta llegar a Julen. Una vez hayan hecho el pozo paralelo, deberán encamisarlo. Una tarea de seis horas a la que hay que añadirle dos horas más para realizar un relleno que asegure los tubos a las paredes del túnel. Será entonces cuando desciendan los mineros que cavarán los cuatro metros. El último tramo de galería. Cada metro supone ocho horas de esfuerzo. En total, todavía faltarían cuarenta horas para finalizar el rescate.