La segunda jornada del juicio contra los dos acusados por matar al niño de 20 meses, su madre Fadila C. y su entonces pareja, David F., está resultando realmente dura con los testimonios de los agentes que participaron en el caso.
El inspector de la Policía Científica explicó que "pocas veces se ven agresiones de ese tipo". "En 20 años de servicio nunca vi nada igual. Hubo un indudable maltrato previo brutal. Vi a compañeros saltárseles las lágrimas", ha indicado el inspector.
"Lo que observamos en la inspección ocular posterior en el piso -de los dos acusados-- es compatible con la brutal agresión, pero además la escena está manipulada para que quien entrase no lo notase", ha indicado el agente que ha detallado como hallaron restos de sangre en muchos lugares de la habitación del pequeño y en el salón el vivienda que indicaban que hubo "golpes violentos contra el pequeño que además debió de ser agitado e impactado contra la pared".
Sobre esos "indudables maltratos previos", el agente ha detallado, entre otras cuestiones, como el cuerpo del pequeño presentaba el fémur fracturado con "el hueso separado tres centímetros lo que tuvo que producirle un dolor inmenso, lo mismo que una quemadura profunda que debió de ser dolor insoportable". "Llevaba padeciendo ese sufrimiento muchos días antes de aparecer muerto en las vías del tren", ha insistido.
El agente, que fue prolijo en detalles, ha explicado a la sala en presencia de los acusados que escucharon fríamente el relato, que todo indica que "al bebé se le da muerte en el piso pero muy posiblemente no fuese una muerte instantánea". También dijo que la intención de la persona que tiró la maleta con el cadáver era ocultarla y que no la encontrasen.