Megan Brannan, una joven de 24 años, falleció el pasado 15 de octubre tras haber enfermado después de haber salido a pasar una noche de fiesta por Tenerife. Todavía se desconocen las causas exactas de su muerte, pero la familia está consternada, según informa The Sun.
Megan, que tenía una niña pequeña, había recibido la visita de su familia desde Escocia al lugar donde ella se encontraba trabajando. Los familiares fueron a pasar unas pequeñas vacaciones con ella, y la joven decidió salir de fiesta. Tras ello, al día siguiente comenzó a sentirse muy mal, pero lo atribuyó a la resaca por la noche anterior y no acudió al médico.
Pero al día siguiente el dolor no cesó, y solo un día después la chica ya no volvió a despertar. Sus familiares han compartido a través de las redes sociales su dolor por la pérdida de la joven madre, y han iniciado una campaña en GO FOUND ME para recaudar fondos para su familia, ya que deja a una hija muy pequeña huérfana.