El Gobierno de Aragón da por estabilizado el incendio declarado este martes entre los términos municipales de Perdiguera y Leciñena, en la provincia de Zaragoza. Los medios aéreos se encuentran actualmente actuando sobre el flanco derecho, donde se encuentra la zona de mayor peligro, ya que continúa humeando y las condiciones climatológicas de las próximas horas no son demasiado favorables porque se espera un ascenso paulatino de las temperaturas y rachas de viento. En este contexto, las próximas horas serán decisivas para dar por controlado el incendio.
El director general en funciones de Gestión Forestal del Gobierno de Aragón, Ángel Berzosa, ha atendido a los medios de comunicación este martes en el Puesto de Mando Avanzado (PMA) instalado en la cooperativa de Leciñena y allí ha explicado que desde este martes se han quemado 1.200 hectáreas: 160 hectáreas arboladas, 700 de monte bajo y matorral y terreno agrícola el resto.
Asimismo, Berzosa también ha detallado que el flanco izquierdo se encuentra completamente estabilizado. "El que nos puede dar algo más de problema es el derecho, que es el punto de inicio del incendio y que en caso de algún tipo de rebrote tendríamos más masa forestal. Es precisamente ahí donde estamos concentrando todos los medios aéreos para intentar enfriar la zona cuanto antes", ha detallado.
El operativo está compuesto por alrededor de 150 efectivos. En concreto, están trabajando en la extinción cuatro cuadrillas helitransportadas, cinco cuadrillas terrestres, cinco autobombas y una nodriza, un bulldozer, un avión y un helicóptero de coordinación, y el PMA continúa instalado en la cooperativa de Leciñena, donde hay un director de extinción, dos técnicos del PMA y un grupo de Apoyo al Director de Extinción (GADEX), formado por tres personas. También se cuenta con dos aviones anfibio del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente y un Kamov, otro helicóptero de carga y con gran capacidad.
Están participando en las labores de extinción diez agentes de Protección de la Naturaleza (APN); miembros de la Guardia Civil; la Unidad Militar de Emergencias (UME), con 40 efectivos, seis autobombas, una nodriza y un bulldozer; la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), que continúa en el operativo con una nodriza; Cruz Roja y agricultores de la zona que desde este martes se han volcado con sus herramientas de trabajo en las labores de extinción.
Por último, Berzosa ha recordado que "nos encontramos en máximo riesgo de alerta en prácticamente todo Aragón, para el día de hoy y también para mañana".
Por su parte, el concejal del Ayuntamiento de Leciñena, Víctor Pastor, ha coincidido en advertir de que existen algunas zonas "con bastante fuego" y se encuentran "esperando a ver las condiciones climatológicas, porque hará mucho calor y por la tarde se prevé que sople el viento, lo que complicaría las labores de extinción".
De las más de 1.200 hectáreas quemadas, "el 80 o 90 por ciento corresponden a Leciñena, mientras que el resto son de Perdiguera", ya que el fuego se inició en este segundo municipio, pero en el límite con Leciñena, hacia donde finalmente ha avanzado.
Pastor ha afirmado que se elaboró un plan de evacuación de la población "más que por el fuego, que era difícil que llegara porque los agricultores habían labrado el perímetro del pueblo para hacer cortafuegos, por el humo que venía".
De hecho, "en momentos puntuales" se barajó la posibilidad de desplazar o evacuar a parte de la población, "pero al cambiar la dirección del viento no ha habido más problemas en ese sentido" y finalmente no ha sido necesario adoptar este tipo de medidas. No obstante, sí se tuvo que evacuar en la tarde de este martes a una treintena de vehículos que se encontraban en el Santuario de la Virgen de Magallón, en Leciñena, debido a la proximidad del fuego.
El concejal ha agradecido la colaboración de todos los vecinos de Leciñena y Perdiguera que se han volcado en ayudar a los efectivos del operativo de extinción. "Ayer por la noche unos 70 tractores de agricultores de Leciñena y alguno más de Perdiguera estuvieron labrando toda la zona de los alrededores del pueblo, la carretera de Alcubierre, para hacer cortafuegos" y evitar el avance del fuego.
Además, "los vecinos han ayudado en el abastecimiento de bocadillos y de agua para los efectivos que estaban trabajando allí. Todo el pueblo ha estado volcado", ha remarcado.
El fuego se inició sobre las tres de la tarde de este martes en esta zona de la Sierra de Alcubierre. Al parecer, la avería de un vehículo buggie y su posterior incendio podría ser el origen de este incendio.
La Guardia Civil identificó a dos personas a las que tomó declaración ya que circulaban en un buggie que se averió y se prendió fuego en el paraje de La Pinada, en Leciñena, lo que podría haber causado el fuego en toda la zona.