La Guardia Civil de Tarragona se incautó el martes de tres toneladas de hachís escondidas en un barco de altas prestaciones amarrado en un pantalán del puerto de Burriana (Castellón).

Según ha informado el Instituto Armado, han detenido a dos personas como resultado de las pesquisas iniciadas por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA-1) tras conocer un nuevo 'modus operandi' en la forma de introducir droga en el país --el uso de embarcaciones de recreo de alta gama que dificultan la localización de la droga oculta en los registros--.

La operación 'Deja vu' llevó a desplegar un operativo de vigilancia sobre José Ramón S., de 38 años vecino de Betera (Valencia), y Hamed el K. Alal E.K., de 32 años vecino de Burriana (Castellón), cuya base operativa estaba en Tarragona y en la provincia de Castellón.

El 26 de julio se detectó una salida del barco 'Valentine' que regresó a puerto donde los agentes de vigilancia observaron que la línea de flotación estaba muy hundida en el agua y que la nave se escoraba hacia babor, por lo que se procedió a intervenir el barco.

En el mismo, se hallaron 95 fardos con 3.000 kilos de hachís, que fueron incautados por los agentes junto con el barco y un vehículo de gran cilindrada.

Los detenidos, junto con el género decomisado, serán puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Villareal (Castellón).