El Ayuntamiento de Zamora ha implementado una nueva tasa que comienza a conocerse como 'el impuesto al perro'. Los dueños de canes tendrán que desembolsar nueve euros anuales por cada uno de sus amigos de cuatro patas.
A partir del 2020, el Ayuntamiento cobrará este nuevo impuesto con el que busca sufragar los gastos derivados de la rama sanitaria animal, que cada vez son más debido al aumento de la población canina, según ha publicado La Opinión de Zamora.
Con la tasa se calcula que las arcas municipales podrían recaudar entre 50.000 y 90.000 euros. Una cifra bastante por debajo de los gastos directos e indirectos que convella la presencia de perros en la capital, más de 200.000 euros anuales.
En este apartado de gastos, el Ayuntamiento invierte en censo telemático, evacuatorios caninos (con mantenimiento, reposición y limpieza), dispensadores de bolsas, zonas de esparcimiento, contrato de limpieza y señalización de espacios de suelta, así como en la limpieza de jardines y aceras, la celebración del Día de la Mascota y las campañas de sensibilización.