Alina, una mujer de 36 años, es la última víctima de la violencia de género en España.
Anoche su pareja salía del cuartel de la Guardia Civil de Moraira (Alicante) en calidad de detenido. Se trata de un hombre de 59 años, que se entregó horas después de que el cuerpo de la mujer fuera encontrado en un contenedor de basura.
El equipo de criminalística ha inspeccionado el vehículo en el que Arhur ha ido al cuartel y se ha entregado tras confesar que el domingo degolló a Alina.
El cuerpo fue encontrado en un contenedor de basura, totalmente ensangrentado y envuelto en una sábana. Tenía heridas de defensa en las manos y muchos cortes.
Alina nació en Rumanía y mantenía una relación desde hace años con este holandés de 59 años, dueño de una conocida inmobiliaria de Moraira.
La relación no era lo idílica que él hacía pensar en las fotografías que colgaba en redes sociales. Alina le había denunciado por malos tratos y llegó a tener una orden de protección.
Alina es la única mujer de las asesinadas este año que había denunciado a su pareja. La mujer tenía un hijo que queda huérfano, como otros seis pequeños que ya han perdido a sus madres en lo que llevamos de año por la violencia de género.
Estos menores, tal y como explicó la psicóloga Maribel Manso a Informativos Telecinco, pueden tener efectos en el desarrollo de su vida. “Este hecho puede afectar en diferentes áreas de funcionamiento o áreas de daño;, como son el área social, física y psicológica".
Desde marzo del año pasado, los menores víctimas de la violencia de género pueden cobrar una pensión mínima de 600 euros si cuando se produjo el crimen tenían menos de 21 años o se encontraban incapacitados para el trabajo.
Alina es la undécima mujer asesinada este año. 1.044 desde el año 2003.