Un hombre de 39 años, identificado como David S. O., presuntamente acabó a puñaladas con la vida de su hijo de 11 años en Beniel, Murcia. El pequeño Cristian, la víctima, falleció tras la brutal agresión de su padre, que actuó contra su exmujer como venganza tras separarse hace un año. La pareja además también compartía otro hijo de 18 años. Tras matar a su hijo, el hombre se ahorcó en la cocina, según El Mundo Murcia.

Los vecinos de Beniel recuerdan a David, ‘el cartagenero’ como era conocido, con una personalidad atormentada y posesiva, tenía problemas con el alcohol y nunca superó la ruptura con su expareja, que abandonó el domicilio que compartían con sus dos hijos, Cristian y su hermano de 18 años. El agresor optó por el parricidio tras ser condenado en dos ocasiones por violencia machista, donde más daño haría.

El hermano mayor no quería saber nada de su padre. No tenía que compartir tiempo con él por ser mayor de edad. Su hermano, de 11 años, no pudo decidir. La Guardia Civil ya había alertado de su situación de vulnerabilidad. Las autoridades señalaron en un informe que enviaron al juzgado que eran incapaces de proteger al menor al no haber suspendido las visitas.

La vida de Laura se empezó a truncar desde el pasado mes. Un juez condenó a David, su expareja, por coacciones y le impuso una orden de alejamiento. Dos semanas después, Laura denunció que el hombre se acercó a su casa con la excusa de preguntar por el hijo mayor. David quedó detenido el 18 de junio por quebrantar la medida. La pena de cuatro meses que le impusieron quedó suspendida tras pedirlo su abogada y las acusaciones no se opusieron a los hechos.

El pasado miércoles la Guardia Civil consiguió entrar a las ocho horas y media en la casa de Laura con ayuda del cerrajero. La mujer se encontraba preocupada porque hacía media hora que David tendría que haber traído a Cristian. El niño no aparecía y su padre no respondía a las llamadas. Era el avance de lo sucedería después. Los agentes salieron totalmente sobrecogidos.

La mujer entregó las llaves de la casa a los agentes pero la puerta se encontraba cerrada. Las medidas judiciales impedían a Laura acercarse a la vivienda. El hombre se aseguró de mantener cerrada la casa ya que pasó el doble pestillo y dejó la llave puesta por dentro.

“Esto se veía venir”, comentaban los vecinos de la localidad. Laura dio el aviso a la Policía Local para que entraran en la vivienda y las autoridades encontraron al hombre, colgado en la cocina, y al pequeño Cristian, que yacía entre dos salas de la casa.

David ya no tenía trabajo en su sector, la construcción, por problema de vértigos, pero Laura siempre fue generosa. Tras su ruptura, ella le ofreció la casa familiar para que viviera porque el hombre no tenía ni recursos económicos ni dónde ir. David no superó la salida de su exmujer y arremetió contra ella de la manera más cruel. El ayuntamiento de la localidad ha decretado dos días de luto.