Los efectos que producen en la piel el pasar de pesar 400 kilos a 150, son evidentes en el que un día fuese el hombre más gordo del mundo, Paul Mason. Tras tres años de esfuerzo y sobre todo gracias a un ‘bypass’ gástrico, Paul ha alcanzado un peso que le satisface pero ahora pide ayuda a los médicos para que le quiten ese exceso de piel que le horroriza.
Como asegura Paul en el diario The Sun; “Poso desnudo porque quiero que los profesionales me vean y piensen, es hora de ayudarle en esta situación”
La operación que necesita cuesta unos 70,000 euros, pero Paul carece de esa cantidad, por eso busca algún doctor que sienta piedad por su estado y le ayude a sentirse bien con su cuerpo.