Madrugones y carreras para hacerse con una hamaca en el hotel
Siete y media de la mañana y decenas de turistas ya se agolpan a las puertas de las piscinas de los hoteles donde pasan sus vacaciones. No tienen prisa por bañarse pero corren para reservar una tumbona. Ocurre a diario. Carreras para lanzar la toalla y garantizarse una hamaca. Aunque, a veces, no es solo cuestión de velocidad. También hay que recurrir a la fuerza porque, sí, en el ranking de los disparates veraniegos hay turistas que madrugan para ser ellos mismos quienes montan la piscina. Alemanes e ingleses tienen el récord en esta modalidad deportiva. Algunos turistas se quejan porque aunque algunos hoteles prohíben reservar asiento en la piscina, aseguran que el personal tampoco evita que se haga. Al verlo, los españoles se quedan sin palabras. Se supone que las vacaciones son para descansar y desconectar del estrés diario por ello antes que madrugar hay quien prefiere tirar la toalla.