La Policía Nacional de la localidad cordobesa de Lucena ha recibido en las últimas semanas varias denuncias por la manipulación de las pantallas de los escaparates de varios comercios donde con la ayuda de una aplicación móvil e internet, un grupo de jóvenes habían reproducido un vídeo porno.
La última denuncia la interpuso el dueño de una tienda de electrodomésticos quien además adjuntó las imágenes grabadas por una cámara de seguridad y gracias a ellas se pudo identificar a los autores que son un grupo de jóvenes. Según recoge el medio local Lucena Hoy, lo mismo ocurrió unos días antes en el escaparate de una clínica dental y una farmacia
Esta modificación del contenido promocional por vídeos pornográficos con la ayuda de las nuevas tecnologías no es nada nuevo. El pasado año, la policía ya tuvo que intervenir en Madrid para cubrir una pantalla publicitaria hackeada con un vídeo porno.
La travesura puede tener consecuencias ya que tanto la manipulación de la emisión como la difusión de imágenes de ese tipo a través de internet tienen cargos legales y suponen un perjuicio económico y de imagen para aquellas empresas que se hackean.