Entre gritos de "asesino" fue recibido, pasadas las doce de la noche, Eugenio en su pueblo, Monesterio (Badajoz). El autor confeso regresaba a su casa bajo la atenta mirada de numerosos vecinos que no dudaron en recriminarle la muerte de Manuela Chavero.
La vivienda de Eugenio tan solo se encuentra a unos metros de la de Manuela desaparecida la noche del 4 al 5 de julio de 2016. Allí, fue donde se supone que la mujer perdió la vida de manera accidental, según ha contado el detenido.
Durante unas seis horas, Eugenio ha tenido que describir al detalle lo que sucedió aquella noche del fatal suceso. Tras la muerte, el hombre trasladó el cuerpo ya sin vida hasta la finca de La Hesa que había alquilado a un ganadero y donde cavó la tumba. Un escenario clave ya que allí se recuperan los restos óseos de Manuela una prueba clave que ya está en estudio en el Instituto de Medicina Legal, en Badajoz, donde serán analizados para su identificación.
El autor confeso de la muerte de esta mujer de 42 años desaparecida hace cuatro años, pasará este domingo a disposición judicial, han informado a Efe fuentes de la investigación.
El joven, de 28 años y vecino de la misma localidad, fue detenido a última hora de la tarde del jueves, por lo que la Guardia Civil apurará las 72 horas máximas establecidas por ley para realizar pesquisas de cara al esclarecimiento de los hechos.
La investigación ha sido llevada a cabo por la Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil junto a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Badajoz y está dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Zafra (Badajoz).