El Gobierno estudia ampliar el IMV y tendrá en cuenta a los menores tutelados al cumplir 18
El objetivo es cubrir a más de 700.000 hogares, según Ernesto Gasco
En tres de cada cuatro hogares a los que llega el IMV viven hijos
Se estudia también incluir a menas que a los 18 quedan en al calle
El Gobierno estudia ampliar el Ingreso Mínimo Vital (IMV) para alcanzar a más hogares en situación de pobreza y tendrá en cuenta a los menores tutelados cuando cumplen 18 años y salen del sistema de protección, según ha anunciado el Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil, Ernesto Gasco.
Gasco ha comparecido, a petición propia, así como por solicitud de PP, Ciudadanos y PSOE, ante la Comisión de derechos de la Infancia y la Adolescencia de la Cámara baja, para explicar las líneas de actuación de su departamento. Ahí ha explicado que en tres de cada cuatro hogares, de los 210.000 a los que ha llegado el IMV, viven hijos.
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El objetivo, a su juicio, debe ser cubrir a más de 700.000 hogares y ampliar el umbral para que puedan acceder también a esa renta mínima las familias con pobreza moderada, no solo las que sufren pobreza severa.
Se estudia también que los menores extranjeros no acompañados que al cumplir los 18 quedan en la calle puedan ser también beneficiarios de ese ingreso, ha apuntado Gasco, aunque sea un número "simbólico" de personas. El Alto Comisionado ha puesto también el foco en los extranjeros no regularizados, muchos de ellos con hijos menores, y ha pedido a los diputados que tomen "decisiones valientes" para convertir a España en un ejemplo de solidaridad y convivencia.
Acortar el plazo para optar a un permiso de residencia
Su propuesta es acortar el plazo de tres años en España exigidos para optar a un permiso de residencia, de modo que puedan acceder a él muchos extranjeros que llevan dos años cuidando en nuestro país a niños y mayores, que se han quedado sin empleo por la pandemia y que al carecer de papeles, se encuentran en una situación muy difícil, y en no pocas ocasiones con niños a cargo.
"Hagamos que existan", ha pedido Gasco, quien ha insistido en que mantener la pobreza infantil es más costoso que prevenirla y ha apuntado que el Alto Comisionado está trabajando junto a la Fundación la Caixa para hacer un estudio sobre el coste de la pobreza en España.
Para Gasco, "es clave tener en cuenta la pérdida de talento y de capacidad que la pobreza infantil significa para nuestra sociedad; mantener altas tasas de pobreza infantil es claramente ineficiente, supone un coste social y presupuestario a largo plazo bastante más alto que el de la prevención y de las medidas paliativas de sus efectos".
El Alto Comisionado se ha mostrado convencido de que "nuestro futuro como país depende del presente en el que crecen nuestros niños", ha destacado el incremento de las partidas dedicadas a luchar contra la pobreza infantil en los presupuestos generales del Estado y ha resaltado que la Comisión Europea asignará un 5 % de los recursos del Fondo Social Europeo Plus a la lucha contra la pobreza infantil en el próximo marco financiero plurianual 2021-2027.
La tasa de pobreza infantil superaba el 27% en 2019
La tasa de pobreza infantil superaba el 27% en 2019, pero el Alto Comisionado ha asumido que aumentará con la crisis sanitaria, económica y social derivada de la pandemia y ha apuntado que algunas organizaciones sociales apuntan al 30%. Son cifras "insoportables" y en las que España se sitúa por encima de la media de la UE, ha alertado.
Gasco ha recordado además que la pobreza infantil deja "cicatrices difícilmente reparables" y "lamentablemente, quien es pobre de niño, con bastante seguridad lo será de adulto", un círculo que ha instado a romperlo todos los grupos políticos con un gran consenso. Ha lamentado la situación especialmente vulnerable y grave que viven los niños y jóvenes gitanos, donde la pobreza abarca al 80% por ciento de los menores.
Los "perdedores" de la pandemia
Gasco ha señalado como "grandes perdedores" de la pandemia a los menores que viven en familias en situación irregular administrativa, sin acceso al mercado laboral y sin poder beneficiarse de las medidas de escudo social puestas en marcha durante la crisis sanitaria.