El obispo de Ceuta le cierra las puertas de la iglesia al dios hindú
Las puertas de la iglesia de Ceuta abiertas de par en par para acoger al más grande: a Ganesh, dios hindú recibido por sevillanas. La parroquia, domingo por la tarde, abarrotada. El capataz guiando el paso y la imagen con cuerpo humano y cabeza de elefante postrándose a los pies de la Virgen de África. Así fue la fusión religiosa, la venerada convivencia entre culturas para la que el obispo de Ceuta y Cádiz no ha tenido misericordia. En un comunicado pide perdón por el escándalo y el daño que se haya podido causar a la comunidad cristiana aunque, en Ceuta, nadie se da por ofendido. Defienden la relación entre ambas comunidades y lamentan que desde el Obispado se haya aceptado la dimisión del vicario que aceptó el encuentro. Tras ocho años de tradición a este dios le cierran las puertas del templo.