Michelle Smith, de 42 años, asegura haber estado viviendo un infierno constante durante más de diez años ante una plaga de "ratas gigantes" en su casa de Northfield, Birmingham. "No vivimos junto a las ratas, vivimos con ellas", señala la mujer.
Smith vive con tres de sus hijos ( de 4, 10 y 12 años de edad) en un pequeños apartamento de cuatro camas desde hace 13 años. Durante todo este tiempo, la madre ha tenido que presenciar escenas verdaderamente desagradables con los roedores: "He pisado a una rata sin cabeza en el piso de la cocina con mis pies descalzos, están en todas partes".
La madre asegura que hay al menos "una docena" de estos ejemplares y que su cocina es la habitación más concurrida por las ratas. La situación ha llegado a los límites de una convivencia normal y Smith se muestra preocupada, sobre todo, por los menores. "Los niños y yo hemos estado comiendo en mi cama en mi habitación. No es forma de criar a mis hijos", explica a BirminghamLive.
Además del malestar en su propio domicilio, la plaga de roedores ha llegado a afectar a la propietaria de la casa hasta el punto de sufrir algún ataque de pánico y asistencia médica: "Estoy tomando pastillas para dormir y antidepresivos porque no puedo dormir".
"Nos han visitado miembros del consejo oficial de vivienda, pero nunca se hace nada", lamenta Smith.
La falta de sueño no es lo único que invade a la familia, ya que ninguno de ellos ha podido ducharse o bañarse en su propio baño desde el pasado mes de agosto y se han visto obligados a hacerlo en casa de un conocido: "No podemos vivir así".
Finalmente, la mujer ha querido denunciar los hechos mostrando un vídeo al canal de televisión en el que capta cada vez que se topa con una de estas ratas.