Un coche se para en el control que ha establecido la policía local en una de las entradas de esta localidad gaditana. El agente le pide que justifique su desplazamiento. La persona lo hace. "Es debido a que empiezo a trabajar aquí". La repregunta del agente, que inquiere dónde, recibe una respuesta delirante: "No tengo contrato porque es un trabajo en negro. Es en una empresa que se dedica a fabricar piezas para coches eléctricos".
Así que como quiera que trabajar `en negro´ no es motivo legal -ni ilegal, por cierto- para eludir el cierre perimetral, a lo que hay que añadir la inexistencia de tal fabrica en la localidad, el agente sanciona, obliga a dar la vuelta al conductor y, además de la multa, apunta en su libreta la delirante anécdota.
Es una de las muchas que este domingo publicaba en su facebook la policía local de Chipiona. Las hay de todo tipo y condición, las hay absurdas, las hay originales. Pasen y lean.
Y es que aunque los cierres perimetrales siguen vigentes, hay quien no entiende, dicen los policías locales, que "con todo el dolor de nuestro corazón, si no eres de Cádiz no puedes venir a Chipiona".