El incendio forestal declarado en el día de ayer en el municipio de Artenara ha pasado durante la noche a situación de nivel 2 y el Gobierno de Canarias ha asumido la dirección de la emergencia, en virtud del Plan Canario de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales (Infoca), según ha informado el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 1-1-2.
El incendio, que se originó sobre las 12.10 horas en el paraje de Las Peñas Juncalillo debido a la negligencia de un vecino de Telde, que ya ha sido detenido, afecta a los municipios de Tejeda, Artenara y Gáldar rumbo hacia el Parque Natural de Tamadaba. Como medida preventiva, los vecinos de una decena de barrios próximos al fuego fueron evacuados a instalaciones municipales y al albergue para pasar la noche.
Durante la mañana se incorporarán diez medios aéreos a las distintas tareas de extinción del incendio. Participarán nueve helicópteros de distintas administraciones (Estado, Gobierno de Canarias y Cabildo de Gran Canaria) y un avión. Los medios terrestres continúan trabajando, a los que anoche se sumó la Unidad Militar de Emergencias (UME), a lo largo del día trabajarán más de 200 efectivos. Además los cabildos de todas las islas han ofrecido su ayuda y colaboración al Gobierno de Canarias para intentar sofocar el incendio.
La reactivación nocturna del incendio de Artenara ha elevado la superficie afectada a 1.000 hectáreas, según la estimación de la Dirección de Extinción del Cabildo de Gran Canaria. Los flancos avanzan hacia la Cuenca de Tejeda y el Pinar de Tamadaba.
Continúan cerradas las siguientes carreteras: GC-210, Tejeda a Artenara, del punto kilométrico 0 al 6; GC-21, Cruce de los Garajes a Artenara, del kilómetro 32 a 39, y GC-150, Cruz de Tejeda a Pinos de Gáldar, entre los puntos kilométricos 5,5 a 12,3. El Cabildo recomienda, además, no sobrepasar la zona de Caideros en la GC-220.
La Guardia Civil investiga el origen del incendio, los primeros indicios apuntan a que podría tratarse de una imprudencia. Ya hay un detenido, se trata de un vecino del Telde, de 55 años, que en ese momento trabajaba con maquinaria de soldadura en la zona.
Al principio los habitantes ni se inmutaban pero horas horas más tarde la crudeza de fuego este panorama desolador. Afortunadamente, según el Gobierno de Canarias no hay que lamentar heridos, ni víctimas mortales, aunque sí cuantiosos daños materiales.