El planteamiento y los objetivos de esta investigación se expondrán dentro de la jornada 'El papel global de las medusas y su aumento en el océano', organizada por la Fundación BBVA y coordinada por Carlos Duarte (Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, UIB-CSIC).
Durante los últimos años se ha llamado la atención sobre el aumento global en las poblaciones de medusas ya que el fenómeno, con importantes efectos ecológicos y socioeconómicos, preocupa por su repercusión sobe las pesquerías y el turismo.
Algunos ecólogos marinos han sugerido que se trata de una consecuencia -negativa- de la acción humana sobre los océanos, y que a largo plazo las medusas acabarán dominando los ecosistemas oceánicos. Sin embargo, otros expertos insisten en que aún no hay datos que permitan sostener con rigor estas afirmaciones, y que las observaciones responden probablemente a una realidad más compleja.
Según ha explicado Duarte, los investigadores carecen de un "análisis global" que demuestre que estén aumentando las poblaciones de medusas. "Las medusas muestran ciclos largos, de décadas, en los que se suceden periodos de alta abundancia con otros de baja abundancia. Los artículos científicos y los medios de comunicación reportan los aumentos y proliferaciones en las poblaciones de medusas, pero no sus caídas", ha explicado.
Una revisión del registro fósil sugiere que la aparición de masas de medusas ya se daba en el periodo cámbrico, hace entre 520 y 540 millones de años, y también hay documentos que relatan la ocurrencia de este fenómeno a lo largo de los últimos dos siglos. Además, el examen de registros de larga duración muestra que estas proliferaciones se suceden a intervalos de varias décadas.