"Nuestra hija, una joven de 18 años no puede salir a no ser que sea acompañada, y lo que es peor, tiene que vivir bajo el temor de encontrarse en la calle con sus agresores", es uno de los fragmentos de la carta de unos padres hundidos y que exigen que se extremen las medidas de seguridad para su hija después de que esta fuera agredida por un grupo de jóvenes de los que solo dos, de seis, se encuentran en prisión por falta de pruebas. La familia quiere que se sepa su sufrimiento y lo que consideran una inexplicable decisión judicial y lo ha hecho a través de una carta a Informativos Telecinco en la que se expresa la "realidad de la familia".
Entre ellos el que las pruebas de ADN forenses lo identifican como agresor sexual . El juez lo dejó en libertad porque consideró insuficiente la explicación y los datos del informe de toxicología. El investigado está huido desde hace más de una semana. "Para colmo la situación de extrema angustia que padece, el informe forense confirma la compatibilidad de los análisis genéticos realizados a nuestra hija con el perfil genético del investigado ahora en busca y captura", desvela la carta.
La familia critica la falta de orden de alejamiento, lo que hace que su hija no pueda salir sola a ningún sitio, por temor a encontrarse con sus agresores. Y exige que "detengan e ingresen en prisión a todos los implicados".
El caso conmocionó a la opinión pública después de que una joven denunciara ante la policía municipal de Sabadell que varios jóvenes la habían violado en una fábrica abandonada del barrio de Can Feu, en presencia de otras personas que no hicieron nada para evitar que fuera agredida sexualmente. Los padres de la joven consideran que el hecho de que no exista una orden de alejamiento afecta a todas las mujeres y que el ingreso en prisión es una necesidad para volver a rehacer sus vidas.