Los adultos españoles han quedado en evidencia en el último informe de la OCDE. Un examen de competencias básicas realizado en 23 países, revela que los conocimientos en ciertas áreas de los españoles de entre 16 y 65 años deja mucho que desear, sobre todo en compresión lectora y en matemáticas.
España se sitúa a la cola con el peor nivel educativo, 20 puntos por debajo de la media. Según este informe, tenemos problemas para entender el prospecto de los medicamentos y también se nos resisten algunas obras literarias. En comprensión lectora nos situamos a la cola por delante de Italia.
Pero a la hora de hacer números nuestra comprensión cae en picado, con 23 puntos por debajo de la media, las cuentas se nos resisten. Se nos resiste traducir las facturas de la luz e incluso tareas más cotidianas como ir al supermercado y entender el ticket de la compra.
Unos resultados negativos para España que muchos achacan a la LOGSE, donde se produjo un estancamiento y no se ha mejorado en estas cuestiones.
Unas asignaturas pendientes en las que se tendrá que poner mucho empeño para mejorar y alcanzar a los que se encuentran a la cabeza de este informe con mejor nivel educativo: Japón y Finlandia.